Tanto tiempo esforzándome por nada,
por perseguir visiones rotas
y huir de miradas locas
que me envuelven y derriten
hasta dejarme en el límite.
Tanto tiempo esperando por todo
sin sacarle provecho a la vida,
todo por creer que estabas cerca
que por siempre te amaría.
Tanto tiempo por soñar en mi almohada,
por desojar los árboles con la mirada
al saber que venía el invierno,
en las tristes noches que pasé corriendo.
Tanto tiempo perdida en mis propios pensamientos
creyendo que esconderlos sería lo correcto,
todo por embestir a la vida
tan solo con una palabra y una sonrisa.
Tanto tiempo con la nostalgia en el pecho,
el recuerdo de tu aliento sobre el mío,
tanto, tanto tiempo creyendo
que eras todo y solo mío.
Tanto tiempo con los ojos llorosos
por disputas sin razón, por sobrevivir al corazón
por seguir el rastro de la inmundicia
y creer que llegaría más aprisa si volaba a favor del viento.
Tanto tiempo distante de las personas
que de verdad estaban ahí, pero yo nos las veía
porque las escondía tras un manto de mentiras
todo por creer que la vida era un juego
todo por soñar con un futuro nuevo.
Todo, toda esta palabrería infernal
solo porque no me puedo explicar,
por esconder tantos años mis sentimientos
por ser una temerosa sin tiempos
por ser el favor que nadie pidió.
Todo esta basura que hoy vivo
es culpa de toda esta mentira descortés,
por querer seguir sola, por ser infame
y creer que era lo suficientemente fuerte
para seguir sola y a pie.
Y todo esto es porque nunca supe cómo se sentía
un abrazo cálido cada día, todo por perder mi tiempo
en medir los sentimientos, todo por ser inexpresiva
ante los que de verdad me querían...
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